Tejidos que te protegen del sol y la lluvia

Los tejidos que se usan en los toldos suelen tener diferentes funciones. La principal es tamizar la luz solar y refrescar la zona que se encuentra bajo él. Se puede decir que es el sustituto artificial del árbol que nos cobija. Una segunda función que se le exige cada vez más es la de protegernos de la lluvia. Aunque para esta última no sirven todos los tejidos que se emplean en los toldos.

Diferentes materiales de toldos

El PVC funciona muy bien frente al agua, pues se seca rápidamente y es un material completamente impermeable. Muchas veces es la estética de este material la que hace que se descarte.
Si necesitamos algo más estético y resistente, el tejido acrílico es una buena solución. Además de la protección frente a la lluvia, también filtra hasta un 80% de los rayos solares. Funcionan muy bien cuando poseen recubrimiento exterior, pues sirve tanto para el agua como para la suciedad. Si no poseen esta protección, se deteriorarán rápidamente.

Por otra parte, el poliéster tiene una mayor resistencia, tanto al sol como al agua. Y es que suele recubrirse de PVC. Si usamos fibra de vidrio (otro tejido microperforado, como el poliéster), podemos conseguir la menor concentración de calor posible bajo el toldo.

A la hora de plantear un toldo también hay que tener en cuenta el color. Cuanto más oscura es la lona, mayor es el porcentaje de rayos UVA y UVB al que impide el paso. Por lo que la elección del color no responde solo a criterios estéticos.

Finalmente, hay que tener en cuenta que el elemento natural que puede perjudicar más a un toldo es el viento. Por eso también existen sistemas de detección de viento que pliega el toldo automáticamente en condiciones adversas. Si el toldo no dispone de estos sistemas, es importante hacerlo de forma manual cuando corresponda.